La trayectoria ejemplar de Jaime Alfonsín
El podcast de Francisco Marhuenda - En podcast av La Razón

El relevo de Jaime Alfonsín como Jefe de la Casa Real cierra una etapa brillante al servicio de la Institución que comenzó cuando asumió en 1995 la jefatura de la Secretaría del Príncipe de Asturias. Desde entonces ha estado al lado de Felipe VI ejerciendo un papel determinante que le ha granjeado un respeto y admiración generalizados. Cuando se incorporó al cargo era un brillante abogado del Estado que trabajaba en uno de los despachos más prestigiosos de nuestro país. La decisión que tomó entonces le define como funcionario al servicio del Estado. En lugar de seguir como socio y estar en consejos de administración prefirió trabajar al lado del heredero de la Corona. No definiré como sacrificio asumir un cargo tan interesante como apasionante, pero hay que reconocerle esa vocación de servicio que implica anteponer los intereses personales a un bien mayor como es asesorar y ayudar al Príncipe de Asturias y, posteriormente, al Rey de España. Lo ha hecho en circunstancias complicadas y difíciles, pero demostrando en todo momento su prudencia, cualificación y eficacia. En 2014, Don Felipe asumió la Corona y Alfonsín asumió, como tránsito natural, la jefatura de la Casa.